Los viernes milagro

El Hospital Puerta del Mar está en precario, el personal sanitario, pacientes y familiares, sobreviven a una situación no reconocida por la Junta. Alta y pa' casa, llévatelo y obsérvalo, ¿quien yo?, retraso en intervenciones por falta de material, analíticas tapabocas y a correr.
Ayer Domingo de Resurrección, urgencias como una feria, cinco ancianos en camillas en una sala de escasos 9 m2 con un familiar "celador", esperando y compartiendo quejidos, faltas de intimidad e indignidad para la persona querida. 
Los ancianos no valen nada en esta sociedad y en la prioridad de los presupuestos y los servicios públicos, son simplemente restos del naufragio. Si no honramos y respetamos a nuestros mayores, por la ley de la vida estamos condenados a sufrirlo en nuestras carnes. 
Hay muchos celadores, auxiliares, enfermeros, médicos y especialistas en el paro o en bolsas de empleo indigno, buscad soluciones presupuestarias, imaginación y compromiso.
Los jueves milagro, peli de Berlanga de los 50, metáfora de vida de la época. Pues bien de los creadores de los jueves milagro, ahora llega; los viernes milagro en el hospital, vacían plantas, altas sin sorteo, reducen personal, y soportan el bajo mínimos en casas propias de acogida y plantas semivacías de personal y pacientes. Eso sí, el lunes el hospital se convierte en Lourdes, es como si pararan autobuses de enfermos en la puerta a la búsqueda del milagro en jornada laboral, un ciclo de asistencia sanitaria pública en días laborables.
Respeta y cuida a tu padre, eres tu. 
Respeta y cuida de los mayores, seremos nosotros y fueron nosotros.

Emiliojo