El verano es como la Semana Santa, aún no llega y ya se acaba. El disfrute de sólo la víspera.
Emiliojo
viernes, 23 de junio de 2017
sábado, 3 de junio de 2017
Hoy día de fútbol, hoy día del padre...
Hoy día de fútbol, hoy día del padre. No siempre fui a verlo con él,,,
Cuando sabía lo que veía y veía lo que quería, no se lo perdía, después llegó la desconexión, la ausencia, la mirada al horizonte sin ventana, la mirada al pasado sin recuerdos.
Un partido como el de hoy, una final de Champion, un rato que no un ratito, una excusa de fútbol compartido, una cabezadita en el segundo tiempo, un tómate la cerveza que te voy a echar otra, un poquito de queso y un poquito de jamón cortado por él, maestro jamonero, profesor de padres prudentes y honestos.
Ayer tome una cerveza con mi amigo Manolo Morera, y su discernimiento y decisión de con quien ver el fútbol, si con amigos en casa de Riki o en casa con su papá madridista y futbolero, galerías preciados adicto, padre y madre desde cuando no deben pasar esas cosas, me pellizcó el corazón.
Los amigos y la gente con corazón, te abren ventanas de futuro y de pasado que te hacen revivir y recordar, revivir con inteligencia emocional te hace liberar restos de pena, llorar y desahogar tan bueno como reír, recordar al canoso del pantalón caído, al montañés de la esquina del sofá del cuarto de estar, el catador de fino de Chiclana fresquito, el papito de mi corazón.
Hoy día de fútbol me levanté con esa canción, y aquí estoy haciendo terapia entre lágrimas evangelizantes, entre pellizcos de fotos de lo que siempre será.
Las excusas son tan importantes como las formas, mucho más importante que el qué y el fondo.
Papá hoy sin estar estando, lo veremos juntos, y conspiraremos juntos para que pierda el Madrid, forza Juve y viva la Vida. Te quiero papá.
Emiliojo
Cuando sabía lo que veía y veía lo que quería, no se lo perdía, después llegó la desconexión, la ausencia, la mirada al horizonte sin ventana, la mirada al pasado sin recuerdos.
Un partido como el de hoy, una final de Champion, un rato que no un ratito, una excusa de fútbol compartido, una cabezadita en el segundo tiempo, un tómate la cerveza que te voy a echar otra, un poquito de queso y un poquito de jamón cortado por él, maestro jamonero, profesor de padres prudentes y honestos.
Ayer tome una cerveza con mi amigo Manolo Morera, y su discernimiento y decisión de con quien ver el fútbol, si con amigos en casa de Riki o en casa con su papá madridista y futbolero, galerías preciados adicto, padre y madre desde cuando no deben pasar esas cosas, me pellizcó el corazón.
Los amigos y la gente con corazón, te abren ventanas de futuro y de pasado que te hacen revivir y recordar, revivir con inteligencia emocional te hace liberar restos de pena, llorar y desahogar tan bueno como reír, recordar al canoso del pantalón caído, al montañés de la esquina del sofá del cuarto de estar, el catador de fino de Chiclana fresquito, el papito de mi corazón.
Hoy día de fútbol me levanté con esa canción, y aquí estoy haciendo terapia entre lágrimas evangelizantes, entre pellizcos de fotos de lo que siempre será.
Las excusas son tan importantes como las formas, mucho más importante que el qué y el fondo.
Papá hoy sin estar estando, lo veremos juntos, y conspiraremos juntos para que pierda el Madrid, forza Juve y viva la Vida. Te quiero papá.
Emiliojo
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