sábado, 20 de septiembre de 2014

Hijo y Padre

Visitarle, hablar con el padre mirando al hijo, su madre aún enferma espera cita con la serenidad de la entrega. Sus miradas hablan, la mística es una red social divina con wifi, su quietud me tranquiliza, mi memoria me emociona, su túnica me enseña y abriga, el hijo en mi tierra es también padre. La oración vehicular no pide, los pelos de mi cabeza están contados, un saludo vestido de labor que por impulso se ha convertido en oración.
Sucursal convertida en oficina principal, patria de una infancia, desierto de más de 40 días solo tentado por la ocupación y el cansancio, marea baja y marea alta, ciclo de luna católica, reencuentro en el camino.
Ellos mantienen, no esperan esperando, no castigan, no hay reproches, el teléfono de la oración sirve de hilo conductor aunque no compartamos el pan estival. No es magia es fe, no es intercambio es amor, no es necesidad es esperanza.
En busca de una solución, carta del César con buenas noticias, cita con un hermano que hace de Sancho Panza con nombre de Juan, agradecido y aprendido, una actitud que abraza sin mediar palabra, muestra de vida, cadena de favores unidireccional. Paulo espera vestido de príncipe, la sonrisa de la bondad, las puertas abiertas de par en par.
En el prójimo está la felicidad y esta si es bidireccional, Nombre de cuento para ella, la que debe convertirse en mi hermana, acuerdo de pan de vida, sus últimos años ya tienen quien, mi sentimiento de culpabilidad persiste igual que el vivir sintiendo, aporto una de mis luces, la búsqueda perseverante del compromiso errante.
Aún quedan hitos, la trazabilidad de una etapa por delante, el trabajo y el desvelo conspiraron con el universo, y mi felicidad es inmensamente serena.
Mamá espera su operación para volver a tener dos piernas, a papá le espera su casa franciscana en tanto que, y ella será la conductora de su ruta de vuelta a casa.
Soy padre de una parejita, por la gracia de Dios son mis padres...

Emiliojo

jueves, 11 de septiembre de 2014

Canal Cocina y yo

Hoy he almorzado solo, con Canal Cocina sintonizado en la tv, estaba el Chef Ramsay, er de pesadilla en la cocina y masterchef,  cocinando con su chiquillo una cena italiana; Carrillera con pasta,  panacota y no sé que coone más.
Bueno po me comío dos platos de lentejas hastarnuo... menos mal que terminó si no me como la olla entera. Estaba hipnotizado, comía lentejas sin respirar no bebía ni agua, solo paraba para mirar la pantalla y levantarme pa echarme más, cuando he despertado con los anuncios le he dado gracias a Dios, al niño jesús y a los pastores.
La emisión de Canal Cocina debería respetar la franja horaria de especial protección para las personas a dieta o con el ánimo de hacerla.

Que daño ha hecho masterchef...

Emiliojo