sábado, 3 de junio de 2023

Susurrando

Otoño invierno impoluto como nunca, ni un resfriado, ni unas décimas de fiebre del miércoles noche, ni una neumonía que llevarme a la boca, ni una gripe de cibalgina en supositorios. Celebrado y pregonado, aún con recelo, por no haber podido sentirme un comando por vivir en terreno hostil, y gritar a mis vecinas cada mañana de febrícula, ¡no hay dolor!
Y mira por dónde cuando ya pensaba en las caballas con piriñaca, y en mi talega en bañador, y hoy he amanecido de médico de urgencias, y de ¡cogerme que me muero!
Y asquí estoy postrado y medicado, esperando que no sea lo que no quiero que sea, pero al fin puedo gritarle a mis vecinas, sin miedo y con la cabeza muy alta, ¡noo hay doló! ¡Soy un comando!, y ¡tengo más coone que un loco!
Ahora eso sí, solo estoy pa que me cojan la manita, mientras me acarician la carita, y me susurran al oído, pobrecito…

Emiliojo

No hay comentarios:

Publicar un comentario