Refranes, proverbios y citas, proponen y valoran en mayor medida, escuchar que hablar. Hay un proverbio, chino para no variar, que cuanto menos es gráfico, "tenemos dos oídos y una sola boca, justamente para oir más y hablar menos". Interesante reflexión aunque matizable, la vuelta está en que escuchar es igualmente un ejercicio, no solo con el de enfrente sino con uno mismo.
Cuando hablas no solo repites lo que sabes; es terapéutico, te ayuda a liberar tensión interna y presión; incentiva tu creatividad; durante un diálogo o debate, te obliga a darle una vuelta más y a ordenar tu mente en la búsqueda de soluciones o ideas, una tormenta de ideas interna pensada en voz alta; aporta orden y estructura a tus pensamientos o ideas, exponer te obliga a escucharte, por lo que si lo haces con espíritu autocrítico, te ayudará a mejorar tu propuesta, a valorar sus puntos débiles y depurar errores y debilidades hasta ese momento no atendidas.
Emiliojo
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