Entre tanto, ya hay lío, lo esperado por cierto.
Ya hay denuncias de trata de personas con los refugiados ucranianos.
Si no hay gestión, control y trazabilidad de las personas refugiadas, empezaremos a ver barbaridades amparadas por mafias y malos de corazón.
Europa y sus estados deben con carácter urgente gestionar el movimiento de personas que ya va por 2 millones y se espera llegue a 14 millones.
Acoger, dotar de vivienda, trabajo, seguridad social, seguridad jurídica y administrativa y bienestar, es tan complicado como necesario, si no lo que hoy son cañas mañana se convertirán en lanzas.
La iniciativa privada, asociaciones del tercer sector y personas sensibles y solidarias hacen lo que pueden en él qué, cómo, quién y cuándo. Pero en ese proceso se infiltran hijos de puta que se aprovechan de la desesperanza de los demás.
Dios nos perdone…
Emiliojo
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