Un tú, que te dice eres barca, de equipaje lo que temo, no hay libros, apenas agua, ni rescate solo un remo.
Sabes quien eres, reconoces tu ecuanimidad, tu sabiduría y compasión, tu camino y tu reino de cielo, pero ahora ¿solo hay corazón? Todo lo demás no es, ni existe, ni sirve.
Tu esencia es lo único que cuenta, sin olvidar su impermanencia.
Emiliojo